La narración oral puede escucharse en la voz argentino Alberto Laiseca y resulta interesante para los no iniciados porque hace una aproximación al contenido. Ese relato difiere de la traducción del mismo texto que puede leerse en https://ciudadseva.com/texto/el-extrano/. Esta a la vez difiere del texto publicado originalmente en inglés
El título original, “The Outsider”, parecería ajustarse más al contenido. El outsider es un forastero, alguien que viene de afuera, que no pertenece a ese lugar en el que pretende ser incluido o quien estando fuera no quiere ser incluido. Hay outsiders en la política, en la música, en el cine.
El protagonista se define a sí mismo como tal en el último párrafo del texto.
Lovecraft mantiene en este cuento un ritmo de avance constante. Partiendo de recuerdos tan sombríos como su entorno, el relato da un giro, ocurre una peripecia y el relato se dirige hacia la agnosia final.
Podría decirse que hay tres momentos relevantes que marcan bien el inicio, el quiebre medio en la trama y el final que se vislumbra en el último tercio.
Hay muchos más detalles y descripción del entorno de este personaje, de quien no se dice el nombre, que de su yo físico. Aunque dice que ha leído, no tiene otro con quien hablar. De hecho no habla.
Cuenta su circunstancia en pasado. Nos da la pista de que no regresó a su lugar de partida.
Recuerda que buscó salir a la luz (¿la caverna de Platón?) pero cuando lo logra resulta ser un extraño que deambula entre otros extraños. El “arriba” y el “afuera” le traen vagos recuerdos, dice.
El drama final y definitorio del personaje- esto es una interpretación-, es no reconocerse, no reconocer su imagen. Ha encontrado a “otro”, amenazante y horrible del que huirá; no quiere ver más a “esa cosa abominable surgida en aquel gran marco dorado” que es él mismo, su imagen, en un espejo que para el protagonista es nada más que un vidrio pulido, frío e inflexible.
“I am an outsider; a stranger in this century and among those who are still men. This I have known ever since I stretched out my fingers to the abomination within that great gilded frame; stretched out my fingers and touched a cold and unyielding surface of polished glass”.
Recomiendo su lectura, aunque los relatos de terror no sean de su preferencia, por el manejo impecable de su trama. Si es posible léanlo en inglés, su idioma original.
——————————-
Como nota aparte habría que recordar que el espejo nos devuelve una imagen que está invertida, girada izquierda a derecha en el eje vertical. Las personas no nos ven como nosotros nos vemos en el espejo. Esta podría ser una de las razones por la que nos vemos “raros” o “distintos” en las fotografías.
Comenta en Facebook